tras unos días de descanso, y otros en labores pendientes, hablaremos un poco de lo que vivimos en Bilbo el pasado fin de semana. Dada la gran cantidad de bandas y experiencias vividas, he decidido resumir el festival da la siguiente manera:
- La Clase: Tesla
- La Leyenda: Judas Priest
- El deseo no consumado: Airbone
- La brutalidad sonora: Ministry
- La decepcion: Slayer
- La sorpresa negativa: Dio
- The Show: KISS
Empezando por la organización, habría que darles un escarmiento. Como en la mayoría de eventos de este calibre, el sufrido fan es el que aguanta todas las burradas de los organizadores. Precios, colas para bajar, servicios, terreno, dos minutos para poder cambiar de escenario y otras cosas he podido leer en otros blogs pero que no llegue a sufrir. Nunca se mira por el que paga en estos festivales. Desgraciadamente el único escarmiento que sentirían estos mamones es el no ir a estos sitios, pero desgraciadamente tambien hay cosas que solo se pueden ver de esta manera.
Lástima que no pudimos ver a Airbone, les teníamos muchas ganas a estos australianos, pero llegamos demasiado tarde.
Joder con Tesla. Que calidad de grupo. Banda veterana que se mantiene en una forma envidiable comparados con gran parte de los grupos que pudimos ver. La voz de Jeff Keith no es normal, impresionante. Y el resto del grupo muy bien, sobre todo el gran Frank Hannon.
Para alguien como yo que nunca había visto a Halford en directo, es complicado el hacer una valoración de lo que pude ver. Las noticias de que estaba teniendo problemas con la voz hizo saltar la alarmas, pero se puede considerar que estuvo correcto dentro de sus posibilidades, ya que parece bastante cascado físicamente. Como dice mi colega Juan, los monitores donde Halford leía las letras, lo podían haber puesto un poco más grandes para que no se tuviera que agachar tanto al leerlos. Con esa ración de clásicos (solo dos temas de Nostradamus) no se puede fallar.
El sonido de Ministry fue realmente alto y salvaje, con un Al tambien bastante cascado. Y Slayer, sin haberlos visto nunca en directo, no ofrecieron lo que yo imaginaba que podía ser un directo de ellos. Un recital con altibajos y con muchos parones incomprensibles.
Y la otra leyenda que parece estar un poco cascada es Dio. En los previos del recital hablábamos de que era el que mejor que podía estar dentro de todos los veteranos del festival, pero la verdad es que tambien tuvo bastantes problemas durante su actuación (muchos solos para descansar y demás artimañas).
Y la razón de este viaje no nos decepcionó. Sabíamos lo que veríamos, y eso era lo que queríamos ver. Puede que un americano que los haya visto muchas veces, espere poder escuchar en directo temas raros que no suelen tocar y demás, pero un españolito como yo (que creo que no los volverá a ver nunca más), lo que quiere escuchar es esa ristra de clásicos con sus fuegos artificiales, su sangre, sus papelillos. Todo esas cosas que durante tantos años hemos visto en infinidad de VHS´S y DVD´s. Así que como eso es lo que quería ver, disfrute como un enano.
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